
Los matrimonios no se destruyen de la noche a la mañana. Generalmente, las grietas comienzan pequeñas: palabras que hieren, distancias emocionales, problemas no resueltos… hasta que un día parece que el amor se ha apagado. Pero la buena noticia es que Dios es experto en restaurar lo que parece perdido.
📖 “Y os restituiré los años que comió la langosta…” (Joel 2:25).
💡 Hoy conversaremos sobre:
Identificar la raíz del conflicto y no solo los síntomas.
El poder del perdón genuino y la sanidad emocional.
Cómo reconstruir la confianza cuando se ha quebrado.
La importancia de buscar ayuda espiritual y consejería.
Herramientas prácticas para reavivar la comunicación y el afecto.
💬 Aunque la crisis duela, también puede convertirse en el punto de partida para un amor más maduro y profundo. La clave está en poner a Cristo en el centro, permitir que Él sane las heridas y que ambos caminen hacia la reconciliación con humildad y compromiso.
❤️ No se trata solo de salvar un matrimonio… sino de restaurar la amistad, el respeto y el pacto que un día unió sus vidas.