
La computación de alto rendimiento está en el ojo del huracán, con agencias estatales llamadas a implementar estrategias innovadoras y sostenibles. Este enfoque no solo busca maximizar la eficiencia, sino también reducir el impacto ambiental, marcando el camino hacia un futuro más verde. La integración de prácticas sostenibles permitirá un uso más inteligente de los recursos y fomentará la innovación continua. Con una planificación adecuada, los estados aseguraran que las iniciativas en computación de alto rendimiento proporcionen beneficios a largo plazo. Además, Europa presenta a Júpiter, su primera supercomputadora de exaescala, ubicada en Alemania. Este salto tecnológico promete revolucionar áreas como la inteligencia artificial, modelado climático y ciencias de la vida, lo que destaca un panorama competitivo para la supercomputación. Finalmente, la creciente demanda de seguridad en redes ha impulsado la adopción de estándares como MACsec e IPsec, vitales para proteger datos sensibles en este entorno de alta velocidad. A medida que el sector avanza hacia un futuro digital más seguro, las medidas de seguridad robustas son fundamentales para inspirar confianza en la innovación tecnológica.