
A veces toca resetear. Volver al principio. Ya sea después de una recaída, una lesión, una tusa o un fracaso. Hablar de ese momento donde todo se siente cuesta arriba pero algo adentro te dice: “una vez más, hijueputa”.
¿Qué se siente? ¿Qué te sostiene? ¿Cómo no te traicionás en ese momento?