
“Cuando a Dios le agrada la conducta de un hombre, lo ayuda a mantenerse firme. Tal vez tenga tropiezos, pero no llegará a fracasar porque Dios le dará su apoyo.”
Salmos 37 : 23 - 24 TLA
- El agrado no es un contentamiento hacia el hombre, sino alinear el carácter a la voluntad de Dios -