
¿Sabías que el miedo es el culpable de que no avancemos, de que nos estanquemos? Él será el culpable, pero tú la responsable de tu propio cambio ¿Cuántas renuncias estás dispuesta a hacer solo por no atreverte a mover ficha? Entonces, ¿vas a dejar que tu mente te gane la partida o quieres vivir tu vida? No dejes que tu miedo te haga vivir en un constante jaque mate.