José Echeverri nos recuerda que el liderazgo del siglo XXI es imperfecto, líquido y, sobre todo, humano.

 3 aprendizajes clave que puedes aplicar hoy:

• Abraza el error como motor de crecimiento

José comparte que replicar el mismo estilo de liderazgo en un nuevo contexto lo llevó al fracaso en seis meses. Aprender a reconocer la ceguera del ego y convertir los tropiezos en oportunidades de aprendizaje es esencial para mantener la relevancia.

• Desarrolla una mentalidad líquida y adaptable

En entornos donde el talento es “fluido” y los equipos son interdisciplinarios, el liderazgo tradicional de comando‑control ya no funciona. Los líderes deben actuar como facilitadores, creando redes de colaboración y permitiendo que el talento circule libremente dentro del ecosistema organizacional.

• Fomenta la seguridad psicológica y la experimentación

Sin un espacio donde se permita equivocarse, la innovación se estanca. Promueve una cultura donde los equipos se sientan seguros para proponer ideas disruptivas, probar nuevas herramientas (incluida la IA) y desafiar el status‑quo sin temor a represalias.

Contacto:

joseecheverri.com