
Es común escuchar expresiones como “Estoy deprimido”, “estoy de bajón” o “no tengo ganas de nada” para asociarlo a distintos estados de ánimo que manifiestan en nosotros un sentimiento de malestar, que afecta a la forma habitual, de pensar, sentir y actuar. Sentirse triste y tener dificultades para afrontar la vida cotidiana, no necesariamente indican que padezcas una depresión.