
¿A dónde va señor presidente? ¿Tal vez al despeñadero? Su terquedad y rodearse de gente incapaz de manejar una emergencia como la que estamos viviendo, nos está costando muy caro. La cifra de fallecidos es muestra de ello.
La carta enviada por el defensor del pueblo no hace sino sintetizar el clamor de muchos. Reaccione señor presidente.
Gustavo Romero Umlauff comenta sobre los despropósitos de una cuestionada gestión frente al drama que vivimos los peruanos actualmente.