
¿Extrañas esa fiesta navideña del trabajo donde todos —desde el mensajero hasta el gerente— bailaban bajo las mismas luces?
En este episodio de Sin Direcciones, hablamos de una pérdida que rara vez se nombra: la desaparición de las fiestas laborales como ritual de pertenencia.
Desde los desfiles de vestidos soñados en Ecuador hasta los almuerzos callados en el nuevo país, exploramos cómo esas noches no eran solo celebraciones… eran pruebas vivas de que éramos parte de algo. Y aunque aquí diciembre suena distinto, aprendemos que la alegría no se pierde: se reinventa.
Para todas las que extrañan bailar hasta las tres… y las que ya están planeando su propia fiesta, con amigas, vino y un vestido que las haga sentir invencibles.