
El ataque de Irán a Israel ha desviado la atención, pero en Gaza todo sigue igual. Israel no ha cesado sus bombardeos. Según fuentes palestinas, un ataque sobre Rafah, al sur de la Franja, ha dejado al menos cinco muertos. El número de fallecidos desde el estallido de la guerra el pasado 7 de octubre roza ya los 33.800. No hay alimentos ni medicinas, y la situación de los hospitales es crítica, solo 12 centros, seis en el norte y otros seis en el sur del enclave, funcionan. Hablamos con un testigo de la guerra, Sammy Levi, cirujano español en Israel.