En este primer episodio de la segunda temporada de Latte Con Fe, nos detenemos a mirar el año que termina y el que comienza, no desde la prisa, sino desde el corazón. Hablamos de la importancia de cerrar el año con gratitud, reconocer los frutos que Dios nos permitió cosechar y aprender incluso de aquello que dolió.

Reflexionamos sobre cómo iniciar un nuevo año con Jesús como centro, disfrutando los momentos en familia, valorando lo sencillo y entendiendo que el verdadero propósito no está solo en cumplir metas, sino en amar más a Dios y al prójimo.

Este episodio es una invitación a soñar, proponernos nuevos retos y establecer metas, pero que no se queden en lo material o superficial, sino que estén llenas de sentido, fe y amor. Porque cuando caminamos con Cristo, cada inicio tiene esperanza y cada meta se convierte en misión.

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