
En este episodio de #MuchaMuchacha nos acompañó Frida Araujo, que nos ayudó a comprobar que el karma sí existe para los que son el villano de la historia mientras fantaseamos sobre un planeta con árboles de chocolate y objetos raros que pueden hablar y descubrimos que medir 1.50 y ser neurodivergente no está taaaan mal.