A veces cuando estás bien no sabes que lo estás y hasta te sientes rara de poder expresarlo o sentirlo.
Hace meses te contaba que estaba viviendo una de las peores etapas de mi vida, me sentía en el peor momento hasta que un día todo eso cambió y cesó.
Aprendí entonces a saber cómo es eso de estar bien pero lo que más tuve que trabajar es cómo sostener el bienestar porque es tan fácil adaptarnos a sentirnos mal, pero nos cuesta (o al menos a mi me costaba) sentirme bien.
Hoy te cuento cómo estuvo ese proceso y cómo se que tú también estás bien o cada día estás más cerca de entender tu propio bienestar.
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