
En este mensaje dirigido por el Hno. Jhonatan Ponce, aprendemos que el enojo humano nace de un corazón decepcionado y dividido. Cuando nuestros deseos egoístas no se cumplen, surgen conflictos y nos alejamos de Dios. La amistad con el mundo solo debilita nuestra comunión con Él, pero Dios ofrece gracia abundante a los humildes que le buscan con un corazón sincero.
Escucha este mensaje y descubre cómo cultivar una fe madura que responde con paciencia, no con enojo.