
Disfrazados y sigilosos, nuestros aventureros se infiltran con éxito en el distrito de los esclavos para reunirse con un contacto clave. Allí obtienen la información necesaria para ingresar a las minas de la ciudad. Todo parece ir según lo planeado… hasta que, en el último momento, sin poder verlo, Aelius siente un ruido proveniente de su espalda.