
En este episodio reflexionamos sobre uno de los temas más apasionantes: la teología del cuerpo y su poder para iluminar nuestra masculinidad.
Descubrimos que ser varón no es un accidente, sino un don y una misión: ser custodios, co-creadores y protagonistas junto a Dios en la historia de la creación.
El llamado del hombre es a cultivar, proteger y entregarse con amor.
Rugir desde dentro es abrazar esa identidad y vivirla como un regalo para los demás.