
“Enfócate en lo bueno. En medio de cualquier tormenta, siempre hay algo por lo que agradecer, algo que ilumina el camino, aunque sea pequeño. Tu energía fluye hacia donde pones tu atención, así que elige mirar hacia la luz, hacia las cosas que te nutren y te hacen crecer. Lo bueno está ahí, en tus logros, en las personas que amas, en los pequeños instantes de felicidad. No permitas que lo negativo opaque tu visión; recuerda, lo que alimentas, crece. Hoy, haz de tu enfoque un acto de amor hacia ti mismo.”