
Mefiboset se inclinó respetuosamente y exclamó: «¿Quién es su siervo para que le muestre tal bondad a un perro muerto como yo?». 2 Samuel 9:8
REFLEXION: No intentes entender el proceder de Dios. No pienses si das la talla. Haz a un lado tu hábito de evaluar tus méritos y simplemente abre tu corazón. Celebra Su generosidad. Acéptala con gratitud, y comparte con otros lo recibido.