
Bienaventurados Los Pacificadores | Mateo 5:9La paz bíblica no es ausencia de pleito, sino fruto de la reconciliación con Dios por medio de Cristo (Ro 5:1). El pecado rompe la paz; Jesús, Príncipe de Paz, la otorga y nos convierte en embajadores de reconciliación (2 Co 5:18–20). El pacificador primero vive en paz con Dios y luego la promueve con otros.