
Hay alguna posibilidad de que lo espiritual pase desapercibido de nuestra vista? Quizás pensamos que sí, pero en realidad la mayoría de las veces sólo lo ignoramos con mucha fuerza. Estamos frente a una necesidad universal y una habilidad con la que todos nacemos. Para entenderlo mejor, recuerdo que un maestro me dijo alguna vez, sabes cuál es la diferencia entre una ley y un principio? Que la ley se puede quebrar a voluntad; esto es claro si pensamos en la ley de transito por ejemplo, basta cruzar un semáforo en rojo para ya estar en infracción. Pero un principio en cambio, no puede ser transgredido. Cómo? Así es, pensemos en el principio de gravedad por ejemplo; podemos no conocerlo por su nombre, ignorarlo, desafiarlo, pero es imposible no cumplirlo.
Entonces, si todo está listo para hacer uso de las herramientas espirituales que tenemos, qué estamos haciendo con ellas? Dónde buscamos refugio? A quién acudimos? Te proponemos recorrer algunas ideas referidas a la Oración, un misterio que vale la pena empezar a conocer para que toda nuestra vida espiritual cobre forma.