En el signo Baba Ejiogbe encontramos dos historias que, aunque parecen opuestas, comparten al mismo protagonista: el León.
Dos relatos que muestran sus dos caras:
La del ser noble que es empujado a actuar por la injusticia…
Y la del rey orgulloso que cae por su propio ego.
Juntas, estas historias revelan una verdad universal:
La grandeza y la caída conviven dentro de todos nosotros,
y el destino siempre encuentra la forma de enseñarnos lo que aún no queremos ver.