
Un pastel de autor no es por lo general ni fácil, ni rápido, ni se hace en "cinco sencillos pasos": es casi indescifrable, contiene dentro de sí múltiples elaboraciones, técnicas y texturas. Una pequeña obra de ingeniería comestible. La pastelera Irene Amat se ha formado con los mejores y ahora emprende una aventura en solitario abriendo su propia pastelería de autor.