
En su discurso El marco de la revelación personal, el élder Dale G. Renlund enseña que la revelación personal de Dios se encuentra dentro de un marco claro y estructurado. Primero, enfatiza que la revelación solo se recibe dentro de nuestra propia esfera de influencia, y no para dirigir o decidir por otros. Además, toda revelación personal debe estar en armonía con los mandamientos de Dios y lo que Él ya ha revelado a través de las Escrituras y los profetas. Renlund también explica que la revelación puede ser progresiva, es decir, no siempre recibimos todas las respuestas de inmediato, sino línea por línea. Finalmente, nos invita a reconocer las respuestas que ya hemos recibido y a seguir buscando la guía de Dios con fe y disposición